Cartas desde Punta del Hidalgo
El Mirlo caído en el Parque de la Libertad
Relación de cosas, hechos, momentos acontecidos en estos días de los que podríamos deducir algo así como un sentimiento de cierta ternura.... No sé si le cabe algo de hermosura, la verdad, no creo, en todo caso, dependería de los ojos con que se miren… Son cosas que pasan fuera de nuestro gobierno personal y respecto de las que no pasamos de ser meros espectadores.
En el Parque de La Libertad, había un Mirlo caído, tampoco sabría decir si estaba muerto o simplemente… permanecía dormido…!
En una esquina de la calle Herradores, todas las mañanas y sin temor al frío, se aposta una vendedora de cupones que tiene una mirada noble, conmovedoramente hermosa… me tiene intrigado y hasta creo que la busco al llegar…!
Dos niños cruzaban de la mano por el paso de peatones mientras su Madre, expectante, los protegía con sus ojos alegres y brillantes…!
Un contenedor de basuras, herido por el fuego de la noche vandálica, perseveraba escorado al pie de la acera… haciendo tiempo hasta su retirada definitiva…Para siempre jamás…!
En un rincón del escaparate, el reloj de arena se olvidó de contar lo que dicen que cuenta y parecía también cansado, aburrido, harto de sí mismo…!
Por la acera… una cabellera negra, muy negra… suelta, muy suelta… resuelta y redimida al fin… envidiable naturaleza…!
En un zaguán Lagunero la penumbra fresca esperaba en mudo silencio por los cansados pasos que nunca llegan… y la clemente puerta de madera vieja, allí estaba, ensimismada en sus inconfesables travesías…!
En estos días he disfrutado también con la plenitud que nace en la sonrisa franca de la mujer que despacha el pan en la tienda… y también de la complicidad que me permitió compartir un instante de armonía con el camarero que pone el café… sin la exigencia de tener que cumplir con el protocolo del gesto…!
En la tardecita de ayer, por no ir tan lejos en el recuento, presencié una Rueda de Prensa celebrada en Caracas -TeleSur- y recibí una tremenda lección de dignidad Política de Hugo Chávez, sí, sí… el mismo personaje que tanto y que tan crudamente demonizamos por estos lares… una lección de ese bruto de mierda – ¡disculpe mi Comandante!- a quien le gusta tanto poner como ejemplo a un tal Cristo hijo de María y de José… Y a quien tanto gusta de repartir el pan y el vino con quienes pasan hambre y tienen sed…!
J. Alberto Valadez ![[Img #7774]](https://vergrancanaria.com/upload/images/07_2022/8766_valadez-125.jpg)
Martes 10 de julio de 2012
Relación de cosas, hechos, momentos acontecidos en estos días de los que podríamos deducir algo así como un sentimiento de cierta ternura.... No sé si le cabe algo de hermosura, la verdad, no creo, en todo caso, dependería de los ojos con que se miren… Son cosas que pasan fuera de nuestro gobierno personal y respecto de las que no pasamos de ser meros espectadores.
En el Parque de La Libertad, había un Mirlo caído, tampoco sabría decir si estaba muerto o simplemente… permanecía dormido…!
En una esquina de la calle Herradores, todas las mañanas y sin temor al frío, se aposta una vendedora de cupones que tiene una mirada noble, conmovedoramente hermosa… me tiene intrigado y hasta creo que la busco al llegar…!
Dos niños cruzaban de la mano por el paso de peatones mientras su Madre, expectante, los protegía con sus ojos alegres y brillantes…!
Un contenedor de basuras, herido por el fuego de la noche vandálica, perseveraba escorado al pie de la acera… haciendo tiempo hasta su retirada definitiva…Para siempre jamás…!
En un rincón del escaparate, el reloj de arena se olvidó de contar lo que dicen que cuenta y parecía también cansado, aburrido, harto de sí mismo…!
Por la acera… una cabellera negra, muy negra… suelta, muy suelta… resuelta y redimida al fin… envidiable naturaleza…!
En un zaguán Lagunero la penumbra fresca esperaba en mudo silencio por los cansados pasos que nunca llegan… y la clemente puerta de madera vieja, allí estaba, ensimismada en sus inconfesables travesías…!
En estos días he disfrutado también con la plenitud que nace en la sonrisa franca de la mujer que despacha el pan en la tienda… y también de la complicidad que me permitió compartir un instante de armonía con el camarero que pone el café… sin la exigencia de tener que cumplir con el protocolo del gesto…!
En la tardecita de ayer, por no ir tan lejos en el recuento, presencié una Rueda de Prensa celebrada en Caracas -TeleSur- y recibí una tremenda lección de dignidad Política de Hugo Chávez, sí, sí… el mismo personaje que tanto y que tan crudamente demonizamos por estos lares… una lección de ese bruto de mierda – ¡disculpe mi Comandante!- a quien le gusta tanto poner como ejemplo a un tal Cristo hijo de María y de José… Y a quien tanto gusta de repartir el pan y el vino con quienes pasan hambre y tienen sed…!
J. Alberto Valadez
Martes 10 de julio de 2012
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