Cartas desde Punta del Hidalgo
La ventana cierra el destino de los helechos dormidos
A veces siente uno tanto temor injustificado... En realidad, sólo se trataba de abrir las ventanas de par en par y permitir que la casa toda se llenase de luz...
Y de aire limpio... Y del verde intacto que marca el destino de los helechos dormidos...!
Abrir las ventanas... respirar hondamente.. Volver sobre nuestros pasos sin dejar de avanzar...!
Las ventanas cerradas... El resplandor que nos engaña...! Sólo reconocemos en los otros el brillo de sus ojos juveniles...!
Y el aroma del café refuerza la espera mientras nos engañamos a oscuras con la ventana cerrada...!
Y no estaremos para contarlo...! Y la casa queda ajena a los nuevos temores que llegan...
Y... Si lo sé, no vengo...!!!
J. Alberto Valadés
6 de diciembre de 2012

A veces siente uno tanto temor injustificado... En realidad, sólo se trataba de abrir las ventanas de par en par y permitir que la casa toda se llenase de luz...
Y de aire limpio... Y del verde intacto que marca el destino de los helechos dormidos...!
Abrir las ventanas... respirar hondamente.. Volver sobre nuestros pasos sin dejar de avanzar...!
Las ventanas cerradas... El resplandor que nos engaña...! Sólo reconocemos en los otros el brillo de sus ojos juveniles...!
Y el aroma del café refuerza la espera mientras nos engañamos a oscuras con la ventana cerrada...!
Y no estaremos para contarlo...! Y la casa queda ajena a los nuevos temores que llegan...
Y... Si lo sé, no vengo...!!!
J. Alberto Valadés
6 de diciembre de 2012







Normas de participación
Esta es la opinión de los lectores, no la de este medio.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios inapropiados.
La participación implica que ha leído y acepta las Normas de Participación y Política de Privacidad
Normas de Participación
Política de privacidad
Por seguridad guardamos tu IP
216.73.216.57