Otra oleada de pateras ante inoperancia del Gobierno

 La inoperancia del Gobierno Central vuelve a quedar al descubierto con la llegada del buen tiempo en el mar después de dos semanas con la borrasca Filomena, porque ha sido todo en un uno, se reactiva de nuevo la oleada de pateras y ya llevamos casi 400 inmigrantes que han llegado en pateras desde este lunes a las islas.

  Entre ellos también un buen número de menores (33) a los que tendremos que acoger con recursos del Gobierno de Canarias y sin posibilidad ninguna de repatriar a Marruecos o a sus paises de origen ni tampoco de remitir o trasladar a la península dada la conducta del Gobierno Central negandose o dificultando esta opción.

  La noticia ya no es la reactivación de las pateras, sino que no se aprecia ninguna efectividad en las gestiones que haya realizada la Ministra de Asuntos Exteriores o del propio Ministro del Interior Grande Marlaska cuando visitó Marruecos.

   Se ha informado que habrá traslados hasta El Aaiun pero sigue sin informarse con claridad ni con datos objetivos de estos vuelos o planes.

   En cambio, respecto a los problemas de delincuencia e inseguridad que han suscitado en el sur de Gran Canaria el alojamiento en hoteles de varios miles de inmigrantes, tanto adultos como MENAS, la solución del MInisterio del Interior ha sido la de reforzar unicamente con 40 policías nacionales la comisaría de Maspalomas y negar el traslado del Grupo de Reserva 8 de Guardias Civiles desde TF a Mogán.

  Las contradicciones son igualmente patentes en los responsables socialistas como la Delegación del Gobierno en Canarias y la alcaldesa de San Bartolomé de Tirajana, ambos señalan que los incidentes son puntuales pero refuerzan con 40 policias nacionales en las calles.

    Especialmente grave que la alcaldesa Conchi Narváez siga con un doble lenguaje que le impone su Partido en la defensa del Gobierno de Madrid, por cuanto la realidad vecinal y empresarial es que en Maspalomas ya hay bandas organizadas de magrebies que han ocupado zonas y se disputan con violencia la ocupación de las mismas ademas de robos con violencia y asaltos.

    El daño a la seguridad ciudadana es tan palpable que hay alarma en todo el sector turístico y la propia ciudadanía de Playa del Ingles y Maspalomas, que los videos han sido noticia nacional e internacional.

    En Mogán, la respuesta ha sido todavía mucho peor, en la actualidad hay menos guardias civiles que cuando la ola de pateras de 2006 y con peores problemas de seguridad con robos, violencias y sin respetar ni toque de queda en la noche del sábado un restaurante de Puerto Rico fue asaltado tres veces sin que nadie lo impidiera.

    En suma, el Gobierno Central parece inoperante y el Gobierno autonómico sigue en silencio y resignado a no contradecir a su homologo del Estado.