Ministro Escrivá prepotente y ejerciendo de godo con PSOE

 El tercero y último día de la vistia oficial del Ministro de Seguridad Social José Luis Escrivá no ha podido terminar peor para el archipiélago, con mas de mil inmigrantes en 48 horas y una oleada de cayucos y pateras.

A este Ministro, que ya dió un plantón inexplicable el mes pasado, que ha venido a las islas sin ningún compromiso ni solución concreta a ninguno de los problemas mas acuciantes como es la inmigración irregular y el caos administrativo del INSS.

Pero en su visita al Cabildo de Fuerteventura se le ha notado en exceso su antipatía por el Presidente Blas Acosta, y cuando fue requerido por la solución a la llegada masiva de inmigrantes, su respuesta fue un auténtico desaire, no solamente no garantiza su traslado al continente sino que además soltó la bomba al sugerirle al Presidente que en Fuerteventura hay bastante espacio libre y que vayan buscando donde ubicar un nuevo centro de acogida de inmigrantes.

Blas Acosta ha calificado como decepcionante y frustrante la visita del Ministro y consideró una falta de respeto absoluto por sus formas al Cabildo de Fuerteventura.

Escrivá pertenece a la clase de individuos que ocupando un cargo en el Gobierno del Estado, cuando llegan a las islas al comprobar que son recibidos por una la ola de servilismo y peloteo que le hicieron en Las Palmas en Tenerife, pues salen convencidos que en Canarias no hay nadie que se atreva a rechistar ni a decir nada.

    Todavia estamos esperando a que el Presidente de Canarias y Secretario General del PSOE de Canarias Angel Victor Torres diga algo, o recordarle al Vicepresidente del Gobierno Román Rodriguez si esta sugerencia de un nuevo centro de acogida en Fuerteventura no es la vieja idea de que Canarias es un destierro o una prisión para desterrar a la gente desde la Península, o peor todavía, que el Gobierno Central pretende un  proyecto de Lampedusa o Lesbos aquí.

    Estos desaires y desplantes únicamente se protagonizan aquí, en las islas. En Cataluña, Baleares, Navarra, Pais Vasco o Valencia ni se atreven a rechistar ante las autoridades  locales de aquellos lares, pero aquí resulta vegonzoso tolerar esta conducta en un Ministro, pero peor es la de sus compañeros socialistas que se callan y permiten que se vete a Conchi Narváez alcaldesa de San Bartolomé de Tirajana que no fue invitada a la visita del Ministro ó como lo acaecido con el Presidente del Cabildo de Fuerteventura, Blas Acosta también socialista.